La historia del Mothman es realmente curiosa, ya que como sucede con otros criptidos, el patrón que sigue su aparición, auge y declive, parece estar más cerca del seguido por una leyenda urbana que el que habríamos de esperar para unos sucesos aparentemente reales. Sin embargo la aplastante evidencia testimonial acumulada por espacio de varios meses aproximan mucho más a la realidad a esta criatura, que a otras muchas que con mayor antigüedad y lógica zoológica figuran en los álbum criptozoológicos.
El Mothman es especial por muchas razones, pero sus singularidades más destacadas le acercan a los terrenos limítrofes de la ufología, al coincidir sus apariciones con numerosas observaciones de OVNIS en la región, o con la variopinta presencia de otras extrañas criaturas merodeando por los alrededores, incluidas los misteriosos y acosadores hombres de negro. Ciertamente, cuando uno analiza los archivos de los sucesos acaecidos en 1966 en Virginia Occidental, puede llegar a tener la impresión de estar inmerso en un capítulo de Twin Peaks.